Que amaneció con un sol resplandeciente y sin asomo de lluvia y que comencé temprano revisando mis mensajes. A través de Facebook me enteré de que mi amigo Elías Loyola recibió de la Asociación Nacional de Profesores de Matemáticas el merecido reconocimiento a su trabajo, en Colima, durante el Congreso Nacional de Enseñanza de la Matemáticas; la verdad es que da gusto. Luego la reunión con amigas que hacía mucho no veía, juntas en ocasión del baby shower de Nallely, la nuera de Normita; Magui pasó por mí y pudimos conversar de ida y de vuelta. Hace falta la Mayestra y su sentido común. En un mundo donde se le da vuelo al sentimentalismo y la necedad, es muy saludable la voz de la gente sensata.
De regreso en mi depa y después de vestirme “de civil” me fui al súper a comprar una escoba para reponer la que se rompió ayer. Y a pasear un rato por la playa en un día claro en el que podía verse claramente la costa de Coronado, del otro lado. Hubiera sido un desperdicio no aprovechar semejante tarde. Me encontré varios cambios some for ever, not for better: un 7 Eleven con vista a la playa, la reposición de las rejas de la frontera y la construcción de un muelle pegado a la reja pero del lado gringo. No había mucha gente a pesar de la bondad del clima.
Ya en casa me puse a lavar alguna ropa, a guardar cosas que en la semana fueron quedando regadas y a cocinar para algunos días de la semana próxima que se avizora pesadita. Lo bueno: que sólo restan tres semanas para que termine el semestre!
Mientras trajinaba aproveché para escuchar la música que he ido seleccionando en You Tube, muy variada para no darme tiempo a pensar, y en eso sigo. Con alguna, de plano, si me tengo que poner a bailar. Pero en este mood seguramente dormiré muy tranquilamente.
bparramosqueda 